"Esto, esto, esto es baloncesto". El grito de guerra de los aficionados de la Penya se escuchó con más fuerza que nunca en los últimos años este fin de semana en Vitoria. El DKV Joventut se proclamó campeón de la Copa del Rey tras vencer en la final al TAU Cerámica por 80-82 en un partido de los que hacen afición y que son de esos para guardar en la videoteca de un buen aficionado. Bueno, en mi opinión, 6 de los 7 partidos que se han disputado en Vitoria podrían entrar en ese perfil de emoción (la excepción es, precisamente, el partido de cuartos de final del DKV ante el 'desaparecido' Pamesa) por lo que la gran fiesta del baloncesto español no defraudó tanto al aficionado fiel al baloncesto español como a los que se apuntan en fechas punteras ni a los aficionados extranjeros que pudieron vivirlo(era la primera vez que la Copa se retransmitía en vivo a 8 países europeos).
Volviendo a la final, era el enfrentamiento de los dos estilos que han primado en el torneo: un juego estudiado al milímetro pero con tintes de atrevimiento y espectáculo del DKV contra el ordenamiento de los diversos "yo contra el mundo" de que dispone el TAU. Ganó el primero, para gloria de los que amamos de verdad este deporte. Pero, aunque alguno pudiera pensar que es contradictorio a lo que acabo de plasmar, la final se ganó en la variedad de defensas zonales que planteó Aíto García Reneses durante el partido, algo que no es nuevo pero que cada vez que lo hace le sale de maravilla pese a que sus compañeros le estudien mucho. Lo de 'Don Alejandro' (como le conocen los sabios del baloncesto español y Andrés Montes, que tiene las cualidades de 'sabio' y 'baloncesto' por separado y no juntas) es digno de cátedra para el baloncesto. Como no quiero rellenar con banalidades típicas sobre Aíto, os dejo una frase que ha dicho Pedro Ferrándiz (entrenador con mayor palmares de la historia del baloncesto español) sobre el triunfo del DKV que resume perfectamente lo que pienso de él: "Además de merecido, el triunfo del DKV Joventut es lógico porque, como es sabido, cuando Naismith inventó el baloncesto, Aíto ya entrenaba".
Pero la nave no llega muy lejos pese a que tengas al mejor capitán si tus marineros dan la talla. Y en el Joventut sí que dan la talla, y todos sin excepción. Antes de hablar de las dos grandes estrellas, no me quiero olvidar de algunos esos actores secundarios sin los cuales el DKV no tendría su octava copa en sus vitrinas: Lubos Barton, que aunque no aportó mucho en la Copa es pieza clave de las rotaciones de Aíto; Pau Ribas, chaval de la cantera que ha sabido esperar su momento pese a que otros coetáneos o menores que él se llevaran antes una gloria que también se merece; Jan-Hendrik Jagla, el alemán que también ha despuntado en manos de Aíto y que apunta maneras de jugador determinante y multiusos como otros jugadores 3-4 (véase, Jorge Garbajosa); y Eduardo Hernández Sonseca, un pívot con madera de selección pero que parece que el vestir de blanco no le sienta muy bien (o será que no ha encontrado todavía al entrenador que le apriete la tuerca correcta, que también puede ser).
Bueno, y llegamos al espectáculo. A lo mejor es una exageración lo que voy a decir, pero es lo que pienso: Ricky-Rudy es la mejor pareja del baloncesto europeo y la segunda mejor del mundo (la primera es... Kobe-Pau). Vayamos por orden cronológico. Rudy Fernández es el típico escolta que parece que ha hecho un partido horroroso pero ya te ha metido 20 puntos. Algunos decían que Rudy llegaba a la Copa un poco "desaparecido" y que sus dos primeros partidos fueron mediocres (sin embargo sus 20 puntos ante Pamesa liquidaron a los valencianos), pero él solito se cargó al TAU con 32 puntos y siendo el único que logra la proeza de ser nombrado MVP en dos competiciones coperas (Sevilla 2004 y Vitoria 2008). Su nivel y su estilo de juego ya supera lo terrenal (Europa) y roza lo sobrehumano (NBA), por lo que después de Pekín veremos al sexto español actual en América (si Garbajosa no huye de Toronto, como bien debiera hacer) y octavo de la historia. Hablando de ello, se comenta mucho ahora su affaire del verano pasado con el Barcelona y que no se fue porque no le daban facilidades futuras para irse a la NBA, pero yo creo que fue que Rudy tiene corazón verdinegro y no se veía vestido de otros colores en España y eso algunos en Barcelona todavía no lo asimilan (tanto el no ver a Rudy de blaugrana como el no tener jugadores que amen a su club como Rudy).
Y qué decir de Ricky, la mejor promesa que ha tenido el baloncesto español moderno (no me atrevo a decir de la historia, que no me olvido de grandes que debutaron pronto como Juan Antonio Corbalán, que con 19 años era campeón de Europa). Un chaval de 17 años que no se acobarda ante rivales que bien pudieran ser sus padres es algo que digno de dioses del Olimpo. El desparpajo que tiene Ricky me tiene enamorado, porque el cerebro que tiene este muchacho y lo bien que lo sabe utilizar en la cancha es algo inaudito. Sabe perfectamente cuando marcar un ritmo acelerado para despistar al rival y también sabe leer las defensas rivales buscando la mejor opción de canasta. En Vitoria hizo a la perfección su trabajo de robos y pases para desgracia de los jugadores que le tuvieron que defender (Oliver del Pamesa, Raúl López del Madrid y Prigioni del TAU) y me huelo que la Copa se va a convertir en su torneo favorito con el paso de los años (es más, en 2004 ya ganó la Minicopa juvenil que se celebra paralelamente al torneo grande). Algunos ya le empiezan a comparar con un mito como Drazen Petrovic. Pues a mí que me apunten en esa lista porque el coco de este tío es un privilegio, como la heroicidad que hizo hace 2 años con la selección cadete (prometo hablar de ella en próximas fechas porque me parece antológica, pero adelanto que anotó 51 puntos y se firmo una jugada que no sabía ni su propio entrenador que se pudiera hacer, toma ya).
Tras el análisis hecho al campeón, repasaré algunos detalles que he sacado en conclusión de cada equipo tras lo visto en Vitoria. Para ello seguiré el orden de la Copa, el orden en el que la han ido perdiendo (a veces soy cruel, ¿a que sí?):
Baloncesto Unicaja Málaga: Llegaban los cajistas con la intención de que la Copa fuera el revulsivo a una temporada "rarita", pero le tocó bailar con la más fea: el anfitrión. De lo poquito que se salva del equipo es Marcus Haislip (si este '3' estuviera en otro equipo medio-alto se le valoraría más por el público en general y se le sacaría mayor rendimiento, que es posible aunque alguno no se lo crea) y el 'todo-terreno' Carlos Cabezas, que sigue haciendo méritos para "renovar" su contrato con el Pepu-team. Por otro lado, mención especial merece Sergio Scariolo, mister gomina (ex-aequo con Pat Riley). Ya sabemos todos cual es el estilo de juego del italiano (jugar con marcadores rácanos), pero le va quedando un poco desgastado y a la gente no le gusta apenas (es más, este estilo de juego debe quedar para otros deportes como el fútbol que practica mi querido Fabio Capello. Conclusión: fútbol=aburrido, baloncesto=entretenimiento). Dicho esto, ese estilo le ha valido para ganar títulos y no le faltarán ofertas si se va/le echan de Málaga (yo le doy más credibilidad al "rumor" que maneja Martín Tello como futuro entrenador del Barcelona que el de mi amado/odiado Ramón Trecet, que le postula como futuro entrenador del... ¡TAU!).
AXA Fútbol Club Barcelona: Esta mal que diga esto ahora pero me olía a que el Barcelona no pasaba más de una noche en Vitoria (es decir, la de la previa). Lo de Dusko Ivanovic ya no tiene salvación terrenal o espiritual, no se puede plantear un partido ante el equipo con mejor defensa de la liga con intención de marcador NBA y continuo corre-calles. Dicho esto, no es lógico que Dusko, adalid de las defensas rocosas y contra-ataques mortales, descuide de tal manera la defensa ante un equipo como Bilbao y después quiera remontar de manera desesperada (que le hubiera salido bien si en vez de jugar contra iurbentia jugara contra el Madrid o el TAU) apoyándose en "salvador" Lakovic, todo ello aderezado con el ya habitual show de gesticulación teatral y acoso y derribo al trío arbitral que ya ni siquiera entretiene al espectador "deportivo". Es decir, que por el bien de los culés esperemos que el 30 de junio el señor Dusko haga las maletas para irse lejos del Palau. (PD: Esto está escrito entre el domingo y el martes pasado, así que mis suplicas se han escuchado y se lo han cepillado)
Pamesa Valencia Basket Club: La pregunta aquí es fácil: ¿Ha estado el Pamesa en Vitoria? Lo de su partido es de traca, cabe destacar la anotación final del equipo: ¡59 puntos! Muchos pondréis como excusa que tenía enfrente el mejor equipo de la liga con diferencia o que arrastraba unas semanas con media plantilla en la enfermería (literal, no exagero), pero eso no sirve (para mí) para maquillar el fracaso del equipo taronja. Se supone que tiene "vía libre" económicamente hablando (poder en la familia Roig y patrocinio de unas de las empresas más importantes de toda la Comunitat), pero no se plasma en lo deportivo (y esto no es algo de este año precisamente...). O mucho cambia la mentalidad en la Fonteta o seguirán luchando por el puesto 5-8 cada año en ACB y maquillando las temporadas con participaciones en Copa o ULEB.
Club Baloncesto Akasvayu Girona: La historia de los últimos años en la Copa: "este año sí, esta vez no hay tantos impedimentos para hacer algo importante en la Copa..." Pero esta vez tampoco fue. Pese a enfrentarse a un Madrid mermado en la pintura y tener el jugador mejor valorado de la liga, la ecuación no salió (y eso que más de uno en Vitoria se frotaba las manos viendo a un Madrid líder que caía a las primeras de cambio, lástima). El Akasvayu es ahora mismo el claro ejemplo de lo que denomino "sobre-explotación de los recursos" encarnado en la figura de Marc Gasol. El conjunto gerundense salió como un cohete al principio de partido pero en cuanto tanketa tuvo problemas con las faltas su equipo perdió fuelle. Como muestra decir que desde que Marc se tuvo que ir al banquillo con 4 faltas (a 2:17 del final del tercer cuarto) hasta el final del partido los gerundenses anotaron ¡13 puntos! (media de casi punto por minuto, antológico). Mucho me temo que, entre lo que todos nos imaginamos (un futuro de Marc en la NBA) y lo que empiezo a oír por los mentideros del baloncesto (Akasvayu, empresa inmobiliaria, corta el gran chorro económico por lo que todos os imagináis), en Girona se acabaron los días de gloria y volverán a la zona baja de la tabla el próximo año.
Club Deportivo iurbentia Bilbao Basket Berri: El equipo revelación de la liga dio buena cuenta de esa etiqueta y nos brindó la gran campanada de la Copa (aunque algunos como yo no nos pareciera tal sorpresa visto lo ocurrido este año en ACB). Se cargó al defensor del título en cuartos y manteniéndose fiel al estilo de juego que los de Txus Vidorreta llevan bordando desde 'su' Supercopa de septiembre, ya que la maraña defensiva que plantó a los de Dusko es de las que se deben enseñar en los cursillos de entrenadores para ahogar al rival. Eso y el dúo Macelinho-Weis se pulieron al Barça. En semifinales, volvió a plantar a cara ante el vecino y anfitrión copero, pero entre las bajas de Recker (ante el Barça) y Rancik (ante el TAU) y la falta de acierto desde el 4,60 se esfumó el sueño bilbaíno. Pese a ello, la bilbainada sigue viva en ACB y apuesto que, si el cruce final de liga es benévolo, las semifinales ACB de este año tendrán un tinte de color negro como la camiseta de iurbentia.
Real Madrid Club de Fútbol: Otra de historias que se repiten. El Madrid iba a Vitoria como líder de la liga y máximo favorito del torneo para muchos analistas, pero al final siempre surge algo que trastoca los planes. Esta vez lo que salió fuera de los planes fue el rival que tenía en semifinales, el DKV. En el que, en mi opinión, es el mejor partido que se puede ver a día de hoy en el baloncesto español (y, por ende, uno de los mejores de Europa), se vio un nivel alto por los dos equipos y se decantó por pequeños detalles (defensas zonales de ambos, acierto de triples decisivos, faltas de Smith y lesión de Bullock en el último cuarto, ¿arbitraje permisivo?) que en otros partidos pueden serles favorables. En el partido ante Akasvayu, simplemente decir que lo llevó al ritmo que suele llevar los partidos cuando se siente cómodo (dejarse llevar en los dos primeros cuartos, asestar el golpe en el tercero y asegurar la victoria en el último) y que Bullock se siente muy tranquilo cada vez que tienen en sus manos las bolas calientes de los últimos minutos (por eso mismo el Madrid no ganó al DKV, por no tener las bolas calientes de semifinales). Como dato a mejorar, las defensas variantes de Plaza a veces desconciertan a los propios jugadores blancos y a Joan Plaza se le notó un poco amarrategui en el rush final ante el Joventut (Smith tenía 4 faltas, no 5, así que podía jugar y Bullock podía haber probado al principio del último cuarto para ver hasta donde llegaba). Cosas que, mejoradas ante los play-offs ACB y el tramo final de la Euroliga, pueden darle el ansiado doblete. Aunque la Copa ya van 13 años sin ella...
TAU Cerámica Saski-Baskonia: El anfitrión de la Copa partía con dilema dual de estadística: ¿mantendremos la racha triunfal en año par (2002, 2004, 2006...) o sufriremos la maldición del anfitrión (en época ACB sólo han ganado la Copa en casa el CAI Zaragoza en 1984 y... ¡el TAU en 2002!)? Esta vez salió cruz. El Baskonia planteó desde el primer partido su idea de juego anárquica que tan bien le ha salido en gran parte de los partidos de este año, sólo quedaba esperar que no tuvieran que enfrentarse a un equipo que supiera desactivar su artillería con defensa + contraataque... pero le tocó el DKV en la final. Pese al festival de triples que nos brindó Mirza Teletovic (5/6 para el conocido jocosamente como teletubi) los de Spahija no dieron más de sí ante la apisonadora verdinegra. Los otros dos encuentros se solventaron también desde el 6,25, con la aportación de Sergi Vidal (18 puntos ante Unicaja) y Pete Mickeal (16 puntos ante iurbentia). Tranquilos, no me olvido de Igor Rakocevic, que hizo una media de 17 puntos por partido (19+16+16, casi cantamos línea). Al que veo un punto por debajo de su nivel es a Pablo Prigioni, desde que se fue Scola de su lado el base argentino parece que no rinde como debiera (será que los alley-opps no son tan entretenidos entre dos argentinos que entre un argentino y un brasileño, Splitter). Por cierto, hablando de Splitter, ¿jugó la Copa? Parece que cada vez que vienen a verle scoutings de la NBA se pone nervioso y no rinde ni la décima parte de sus posibilidades. Será que no quiere de Vitoria (normal, con lo bien que se vive y come allí). Mirando al futuro, creo que el TAU no tendrá problemas en ACB y Euroliga manteniendo su estilo... mientras no se enfrente a equipo "desactivadores de artillería". Por si quieren evitarlos, aquí le doy una pequeña lista: DKV Joventut, Panathinaikos, CSKA Moscú...
Club DKV Joventut Badalona: Pese a que ya he hecho un análisis detallado al inicio, quería opinar sobre esto y hacerlo por separado al 'homenaje' que les he brindado. Señor Aíto, esto es baloncesto (como bien cantan sus sabios aficionados) y no arte dramático. Ya sé que siempre lo negarás, pero todos sabemos que lo entrenas con tus jugadores para que lo hagan de mejor manera posible y que no se note mucho que fingen las faltas que reciben. Esta feo para respetar al rival como ellos hacen contigo y no es educativo para el aficionado en general (sí para el aficionado badalonés, obviamente). No voy a negar tu sabiduría, pero a veces pienso que en vez de ganar la Copa, la ACB o la ULEB (o Euroliga, en su defecto) parece que quieres ganar un Premio MAX al mejor director dramático. Recuerde a sus queridos aficionados: "Esto, esto, esto es baloncesto".
jueves, 14 de febrero de 2008
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