sábado, 19 de enero de 2008
Telemadrid, o cuando el baloncesto empieza a ser interesante (es decir, rentable)
Pues sí, amigos. Voy a hacer una entrada sobre el baloncesto y no va a ser sobre el gran clásico que se celebró el jueves en Vistalegre de la Euroliga (ya opiné sobre la valoración que les doy a estos duelos en la primera fase de Euroliga en la previa del Barcelona-Real Madrid de ACB), pero empezaré hablando de ello porque me servirá como génesis del tema que quiero abordar.
El partido, para quien no lo sepa, lo ganó el Madrid por 82-79. Para mí, las claves del partido fueron dos muy claras: el inicio de ridículo del Barcelona (Dusko, no se puede sacar a un tío como Kasun a defender a Papadopoulos y/o Felipe Reyes desde el salto inicial porque se desquicia él sólo y desespera al resto del equipo, sácalo cuando ellos estén secos) y la diferencia reboteadora (45-20 para el Madrid, no digo nada más). Como no le doy mayor importancia al partido más allá de ser un Madrid-Barcelona (aunque se le puede sacar una gran importancia para el camino futuro lejano de ambos en la Euroliga, pero eso es especular y yo no soy Paco 'El Pocero'), aquí cierro mi análisis del partido y voy a lo que me interesa: la televisión.
Para los que viváis fuera de Madrid, el partido se vio por donde os imagináis, en La2 comentado por el narrador desconocido y sin sangre de turno que colocan en Euroliga y por Joan Creus, que es lo único decente que me invita a hacer el esfuerzo de no quitar el sonido y escuchar el partido por la radio (sí, en Radio MARCA, que aunque no me caigan bien yo sí reconozco el éxito del enemigo, no como ellos...). Pero en Madrid el partido se vio por Telemadrid, la cadena regional pública (vamos, la que maneja Esperanza Aguirre a su antojo) por un motivo que os resumo de manera rápida y fácil ("como yo, que soy rápido y fácil, ay oma que rica"):
• Telemadrid denunció ante la justicia que Televisión Española le había plagiado el formato de un programa de televisión y no le había pedido permiso ni pagado compensación económica alguna. El programa de TVE en cuestión es "España directo", cuyo predecesor madrileño es "Madrid directo". Los jueces dieron la razón a Telemadrid y TVE, para evitar el pago de la multa económica, le cedió gratuitamente a Telemadrid los derechos de transmisión del Madrid en Euroliga (para este año y el próximo, si la juega) y de los partidos que TVE retransmita de cualquier equipo madrileño en ACB.
Con las cartas encima de la mesa, vamos al lío. Empezaremos por comentar lo de la Euroliga para cerrar definitivamente el partido del jueves. Ya se vio un principio de esto en el primer partido de Euroliga que dio Telemadrid (Partizan-Madrid), pero el jueves se comprobó la exacerbada imparcialidad de los 3 participantes en la narración (Siro López, narrador; Chechu Biriukov, comentarista; Antonio Vaquerizo, inalámbrico). Está bien eso de dar un toque cercano al equipo en las televisiones regionales, pero lo de Telemadrid sobrepasa el forofismo de barra y bufanda con creces. A la mínima caricia en la zona rival piden falta con vehemencia y cuando la pitan "opinan que pudiera ser intencionada". La objetividad echa periodismo, vamos.
Dejando de lado el partido del jueves pero no las narraciones de Euroliga, lo de Siro López es de traca. Al ser el jefe de deportes de Telemadrid y estar muy bien cubierta las narraciones de fútbol en la cadena por el mítico José María del Toro, se ha nombrado narrador de los partidos. Pero el tipo este viene (como la gran mayoría de los informadores deportivos de este país) del fútbol, por lo que digamos que no "domina" a la perfección el baloncesto. No domina las reglas actuales (¡se quejaba el jueves de por qué no había salto entre dos en una lucha por el balón, por dios!) y hasta confunde a los jugadores del propio Madrid (decirme alguno de vosotros parecidos que encontréis entre Sekulic y Felipe Reyes a parte de su "posición" de pivot, más Felipe que Blagota, y casi su número, 8-9). Al pobre le tiene que corregir su "súbdito" del inalámbrico para que no haga el ridículo en demasía. Menudo cuadro.
Y hablando de la cadena televisiva en sí, lo de Telemadrid es de un morro increíble. Han pasado de "dar obligado" un partido por jornada de ACB (para entender mejor esto leed lo que ocurría en la jornada 4 de la ACB en televisión) a tener la posibilidad de dar tres en una semana (Euroliga + ACB de autonómicas + el partido de La2 si es madrileño). El motivo principal, aparte del tema judicial, es que ahora empiezan a valorar los buenos datos de audiencia que da el basket en las autonómicas, porque ni los datos buenos son de hace sólo dos meses ni es una excepción Madrid con respecto al resto de autonomías (que se lo pregunten si no a Canal 2 Andalucía o TV3). Es decir, que no han descubierto las Américas precisamente.
Con esto no quiero hacer un desprestigio hacia Telemadrid ni pedir que deshagan el camino hecho. Al contrario. Otro en mi lugar ni se hubiera molestado en comentar este cambio de actitud positivo y esperaría a que volviera a la casilla 0 para volver a repartir "regalitos". Sin embargo, si estoy para decir que todos tenemos un pasado y cometemos actos de los que después nos arrepentimos o, incluso, puede ir en nuestra contra al querer enmendar el error (y yo me incluyo el primero aquí, sobre todo en la última frase). Así que le doy mi más sincera enhorabuena a Telemadrid por mimar, ahora sí ¡por fin!, al baloncesto y le recuerdo que no todos los que viven en Madrid y les gusta el basket son seguidores de los equipos madrileños. Que después vendremos llorando porque bajamos la audiencia. Un poquito de objetividad, y todos contentos.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario