El gran clásico del baloncesto español no defraudó en el espectáculo previsto ni, en parte, al resultado con que finalizó. Una victoria justa y trabajada del Barcelona por 84-65 que contó con un protagonista principal: Gianluca Basile. El escolta italiano se hizo un partidazo tanto en el plano personal como en el desarrollo del equipo, con unas estadísticas muy buenas para un partido de las características de un clásico: 23 puntos, 6 asistencias y 4 recuperaciones.
El partido tuvo un inicio igualado, aunque ya en el tramo final del primer cuarto la distancia se veía estancada a los 6-7 puntos en favor de los blaugranas gracias al inicio espectacular de Basile (más en juego de equipo que en aportación personal). Al final del primer cuarto, 21-15.
El segundo cuarto fue el que el Barcelona utilizó para empezar a abrir brecha. Los tiros exteriores del conjunto catalán hacían mucho daño a una defensa madridista desbordada y que tampoco tenía una replica decente en ataque. Los blancos intentaron contestar el tiro exterior, pero no fueron capaces y la excesiva intentona desde fuera les pasó factura (7/22 en triples al final del partido). Fue entonces cuando gracias a dos robos de Basile se amplió la ventaja. Al descanso, la distancia blaugrana llegaba al 42-29.
En el inicio del tercer cuarto se vio una leve mejoría del pobre juego mostrado por el Madrid con 0-6 de inicio (aunque era previsible por: los excelentes terceros cuartos del Madrid este año, los penosos terceros cuartos del Barcelona este año y por el escaso calentamiento blaugrana antes del tercer cuarto de tres minutos). Sin embargo, la reacción fue cortada tras un tiempo muerto de Dusko Ivanovic. Entonces llegó la aportación anotadora de Basile para redondear un partido para enmarcar. También ayudaron a sentenciar el partido Marconato (14 puntos), Trías (11) y Lakovic (11, en un partido donde no se "necesito" su ayuda). El partido estaba casi sentenciado con el 64-42 del tercer cuarto.
El último cuarto se planteó como maquillaje del resultado para el Madrid. En un partido donde sólo Felipe Reyes (quién si no) luchó desde el minuto 1 al 40 y mostró cierto nivel esperado para el encuentro (16 puntos, 7 faltas recibidas). Sin embargo, otros decepcionaron como Charles Smith (cargado con 4 faltas desde el inicio de tercer cuarto), Louis Bullock (errático en los tiros) y sobre todo Lazaros Papadopoulos, que en partidos como este debe demostrar su valía y desembolso del pasado verano, y no fue hasta el último período donde "lucharon" por el resultado. Pero el Barcelona estuvo todo el partido on fire y mantuvo la distancia para certificar el definitivo 84-65.
84. AXA F.C. Barcelona (21+21+22+20): Lakovic (11), Basile (23), Marconato (14), Vázquez (4), Acker (-) -equipo inicial-, Pepe Sánchez (2), Trías (9), Ilyasiva (-), Moncasi (-), Kasun (10) y Grimau (11).
65. Real Madrid (15+14+13+23): Raúl López (2), Sekulic (6), Reyes (16), Mumbrú (7), Bullock (8) -equipo inicial-, Pelekanos (-), Smith (12), Papadopoulos (-), Hervelle (3), Tunçeri (11) y Llull (-).
Árbitros: Daniel Hierrezuelo, Óscar Perea, Juan José Martínez. Smith (min.38) y Marconato (min.38).
Incidencias: partido correspondiente a la decimocuarta jornada de la Liga ACB, disputado en el Palau Blaugrana, ante 7.416 espectadores, según datos oficiales.
Estadísticas oficiales del AXA F.C. Barcelona-Real Madrid 84-65
Tras este resultado, la clasificación se aprieta con un cuarteto de líderes con balance de 11-3: DKV Joventut, iurbentia Bilbao, Real Madrid y AXA F. C. Barcelona. Aprovecho ahora para el apunte sobre los dos primeros de la tabla. El DKV Joventut volvió a mostrar la magia que le caracteriza esta temporada tras su tropiezos ante el Madrid y el Gran Canaria con una victoria holgada sobre Unicaja en el otro partidazo de la jornada. Por su parte, iurbentia Bilbao se confirma como la revelación del año no sin mucho sufrimiento en Manresa y mostrándose como una opción seria para ganar dinero apostando por ellos en la Copa del Rey de Vitoria. De todas formas, para eso quedan 6 semanas. De momento, seguir disfrutando del baloncesto, que el domingo vuelve a haber otra jornada de ACB. Seguimos en tiempo de magia...