La segunda cita del mundial de Fórmula 1 ha servido para mostrarnos de forma clara cual es el verdadero nivel de los monoplazas de Ferrari, ya que han hecho un fin de semana donde nadie les ha podido siquiera acercarse para meterles miedo. Después de los rumores comentados sobre la fiabilidad del coche tras la carrera de Australia, los Ferrari sí han tenido un ritmo alto y constante durante todos los entrenamientos y la carrera. El primer tercio de carrera fue el clave para distanciarse del resto marcando vueltas en 1:35 y sacando casi un segundo por vuelta a sus perseguidores (Kubica, que fue el único que mostró gran ritmo de carrera). Parecía que iba a ser un doblete seguro y sin sufrimiento, pero a mitad de carrera, en concreto en la vuelta 30, Felipe Massa realizo un trompo en la curva 8 y tiró por la borda un fin de semana muy bueno (pole incluida). Se esperan titulares maliciosos desde Italia, ya que muchos allí anhelan que el brasileño abandone la Scuderia y llegué un piloto mejor (Alonso, como todo el mundo sabe). El honor de la escudería italiana se salvaguardó con la gran actuación de Kimi Raikkonen, que realizó una carrera magnífica y demostró que el título del año pasado no fue casualidad. El finlandés sigue mostrando su irregularidad pura: carreras que gana sin despeinarse y carreras que la pifia. ¿Qué tocará en Bahrain?
El podio lo completaron el BMW de Robert Kubica y el McLaren de Heikki Kovalainen. El polaco fue el único piloto de los otros 20 que les siguió el ritmo lo poco que pudo, pero aún así hizo una gran carrera. Ya avisé que los BMW serían serios candidatos a luchar por las victorias porque llevan tres años evolucionando un gran coche y van subiendo de nivel cada año más, por lo que yo no le descarto a él (no a Heidfeld, que le veo un escalón por debajo del polaco) para una victoria pronto (ojo a Barcelona, que la puede liar). El tercero fue el finlandés Kovalainen, que sigue aprovechándose del buen coche que tiene McLaren-Mercedes y de la inercia que le lleva. Sin embargo, el McLaren de Lewis Hamilton terminó quinto porque en su primera parada en boxes tuvo un problema al cambiar la rueda delantera derecha (ya sabemos para quién trabaja ahora el 'tuercas' de Alonso en Hungría).
Por su parte, Fernando Alonso terminó octavo en una carrera que nos mostró la cruda realidad que le toca vivir este año. Tuvo una salida mala, más que nada porque salía séptimo y tuvo detrás suya a los dos McLaren (que les retrasaron por entorpecer a Heidfeld y el propio Alonso en la calificación) que le sobrepasaron en la primera curva. Además, estuvo luchando en el primer tercio de la carrera con el Red Bull de Coulthard por la novena plaza (antes del abandono de Massa) y sufrió bastante para pasarle. Después, en la parte final de la carrera, se acercó a Mark Webber (también Red Bull) pero no le consiguió alcanzar. Conclusión: los Renault no adelantan a nadie y ni tienen potencia para intentarlo. Es el propio Fernando el que afirma que luchar por entrar en los puntos estas primeras carreras es todo un éxito y bien contento que estaba tras la carrera (para el que no lo haya visto en Informativos Telecinco, ha comentado en plan jocoso que "estamos a sólo cinco puntos de Kimi"). O mucho cambia el paisaje o este año celebraremos como victorias sus cuartos o quintos puestos...
Para cerrar, el tema meteorológico. Avise que las previsiones daban lluvia y eso convertiría la carrera en una lotería pura y dura, pero las previsiones fallaron y eso hizo que la carrera fuera 'normal'. Nadie dijo abiertamente que quisiera lluvia ni nadie lo deseaba, pero si hubieran caído varias gotas de agua en la pista le hubiera venido muy bien a algún piloto (¿Alonso?) y hubiera perjudicado claramente a otros como Trulli (que terminó cuarto con un Toyota e hizo una buena carrera favorecido en gran parte por salir desde la segunda línea de parrilla). Pero Malaisia ya es historia, y en quince días vamos al desierto de Bahrain, donde hará tanto calor o más que en Malaisia y habrá mucha menos humedad. Veremos como se plantea el tiempo allí.
Clasificación del Gran Premio de Malaisia de Fórmula 1
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